Cambio de horario

Asumió su nuevo estado no sin antes protestar un poco, ¿Qué sabia Él de amor y esos temblores?, Siempre tan dedicado a complacer a otros, cronometrado a conveniencia de familia y trabajo, rutina cómoda que percibió como tal, el día que sus palabras se cruzaron ¿Qué poder desplegaba Ella? ¿Cómo resistir la complicidad de su abrazo? No lo había planeado, pero íntimamente lo deseaba: Verse reflejado en su mirada, tomar sus manos (fuente de dicha y consuelo) pero Ella, se negaba, a cada cita un pretexto, un peldaño más por vencer y la fantasía creciendo, el deseo sirviéndose en breves porciones, Ella resistiendo, Él marea constante, escribía, escribía, y ella finalmente dijo: Si...


Image hosting by Photobucket


Años después Él preguntaría ¿Porque accediste en mi última carta si únicamente contenía una frase? Ella respondió: tu “Por favor......” Tuvo la culpa.



Comentarios

Entradas más populares de este blog

Dime que si